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Resucitando una HP49G [Jul-2016] ============================================================================================== |
* Introducción y
desarrollo del problema Compré una calculadora HP49G usada allá por 2001. Recuerdo parcialmente detalles; que el anterior dueño era un estudiante de computación (o matemática) y que la pagué u$d 100 (que a la sazón eran $100 pero que al vendedor le interesaba recibir en moneda americana puesto que viajaba al exterior). Siendo estudiante de física, la usé con provecho durante las cursadas de Matemática 1 y 3. Luego, mi entrada al universo de la programación (que se produjo bajo Matlab en las prácticas de cálculo numérico) hizo que eventualmente dejara la calculadora en favor de la computadora. Hace un par de años, movido por la nostalgia, intenté darle ON
pero me encontré con que estaba muerta y no por la presencia de
pilas agotadas. Fracasados todos los intentos por resetearla
(combinaciones de teclas y utilización del "agujerito" trasero)
investigué en internet sobre la posibilidad de abrirla y
repararla uno mismo. Entonces vuelvo al post del foro, pero lo archivo puesto que no
tengo el valor de abrirla y proceder. El valor es algo que viene
y que va y depende de vaya uno a saber qué demonio interior. La
cuestión es que el 18-7-2016 me siento decidido y procedo. Conviene tener a mano para el trabajo el siguiente material: mecha de taladro, hisopo, alcohol isopropílico, pegamento para superficies plásticas y de goma, pinzas (las de punta son más adecuadas pero yo no tenía) y algún elemento con borde de madera. La foto bajo estas líneas ilustra el equipo. ^
Equipo necesario para la apertura y reparación de la HP49G. La
foto es ilustrativa, elementos
^ Aspecto de la calculadora una vez retirada la tapa del compartimiento de las pilas (izquierda). Pueden verse claramente los remaches plásticos. Aspecto luego de remover los mismos (derecha). Algunos fragmentos se observan arriba a la derecha. Luego, comenzamos (con la espátula de madera para no rayar) desde los costados inferiores a destrabar la tapa delantera de la calculadora y proseguimos, una vez que despegamos un poco la parte de abajo, por la parte superior. Comenzamos a vivir la experiencia que se muestra en la imagen siguiente ^ La apertura comienza desde la parte inferior. Una vez que están destrabados todos los bordes notamos que algo
impide separar las tapas definitivamente. Es el conector positivo
del compartimento de las pilas. Si lo miramos de cerca podremos
entender cómo está enganchado. Es fácil liberarlo para tener la
calculadora ^ Detalle del conector positivo que vincula, mediante un enganche, ambas tapas. Ahora hay que liberar la placa circuital que está firmemente ajustada a la tapa superior (la del teclado) mediante un sistema increíble; aletas de metal retorcidas. En el post en inglés sugieren estudiar bien hacia donde está doblada cada aleta para ir en la dirección inversa puesto que hacerlo en la dirección inapropiada puede quebrarlas. Hacerlo con demasiada fuerza también puede quebrarlas. Es evidente que es un equipo pensado para no ser reparado o por lo menos para no ser abierto. No creo que pueda ser operado de esta manera más de tres veces sin quebrar alguna de las aletas, por mucho cuidado que se ponga en evitarlo. ^ Parte superior de la placa lógica donde se muestras tres de las seis aletas que aseguran la misma con la tapa y el teclado. Una vez que liberamos la placa nos queda la parte del teclado, firmemente solidario a la tapa superior por los remaches plásticos que se ven en la foto bajo estas líneas. Sobresale de la tapa la cinta con los contactos que conecta teclado con la placa lógica. Debajo de la cinta existe una almohadilla que en el caso particular de mi equipo estaba levemente desplazada hacia la derecha lo cual hacía sospechar que el extremo izquierdo no hacía muy buen contacto. La foto inferior muestra el receptáculo de la almohadilla cuando la misma ya ha sido retirada. ^ Con el dedo se puede levantar la cinta-contacto para acceder al lugar donde se halla la almohadilla. Era lo único para hacer dado que la placa estaba realmente prístina. No obstante ello le pasé un hisopo embebido en alcohol para limpiar lo que hubiera. Despegada la almohadilla se repegó luego con adhesivo de contacto y teniendo la precaución de centrarla. Acto seguido se procedió a colocar la placa lógica trabándola con las mariposas metálicas giradas con sumo cuidado comenzando desde las cuatro externas para finalizar con las dos internas (la placa tiene que estar bien alineada para que el contacto tenga lugar donde debe) y a enganchar nuevamente el conector positivo de pilas. Al hacer un blankeo con un clip a través del orificio trasero he recuperado mi HP49G. Hay que decir que ahora existe un pequeñísimo juego en la parte inferior: si apreto con los dedos la calculadora en esa zona constato que le falta para cerrar pero es debido a la ausencia de la traba que suponían los remaches plásticos. Es esta una secuela aceptable dada la envergadura de la intervención. |