XXI Festival Internacional de Cine de Mar del Plata 2006: Crónica a dos voces

Por Pablo Martín Cerone (Cine Braille) y Darío Lavia (Cine Fanía)

Debido a la temática del sitio que usted está leyendo (apuntada al género fantástico), y para evitar el síndrome "el que mucho abarca, poco aprieta", decidimos concentrar esta crónica en indagar las películas presentadas en la sección del festival titulada "Cerca de lo Oscuro". Tal sección, orientada a mostrar películas relacionadas no solo con el cine fantástico, sino también con el thriller (por ejemplo, suspenso y policial), parecía englobar (al menos en la teoría), todas las manifestaciones del género que el Festival ofrecía a sus espectadores. De las cientos de películas proyectadas, solo 12 se incluyeron en esta sección, y una de ellas (THE ROOST), no se llegó a proyectar por "problemas técnicos". Otra, THUMBSUCKER, era en verdad una comedia que estaba más cerca de lo claro que de lo oscuro, pero igual se reseñó.

Así que, aclarado lo aclarado, pasamos a reseñar lo reseñable:

13 TZAMETI (13 Tzameti-2005) de Gela Babluani: El joven Sebastien (George Babluani) se dedica, entre otras cosas, a reparar techos de tejas. Es contratado por un extraño cliente (Philippe Passon), que necesita drogarse para vivir. La muerte por sobredosis del cliente y el azar hacen que vaya a parar a manos de Sebastien un sobre con precisas instrucciones. Con la expectativa de obtener un dinero que compense sus servicios, el protagonista sigue las instrucciones al pie de la letra. Primero llega a una estación ferroviaria donde recibe un llamado en el que una voz le indica que debe acercarse a una encrucijada en la carretera. Una vez ahí es subido a un automóvil manejado por un chofer parecido a Boris Karloff en la película THE OLD DARK HOUSE (El Caserón de las Sombras-1932). Finalmente, luego de todas estas alternativas, Sebastien llega a una casa en la que varios caballeros maduros lo examinan de arriba abajo. La intriga se despeja cuando se revela el motivo de tan largo viaje y tanta intriga: Sebastien está por participar, junto con 12 hombres más, en un juego lúdico pero atroz, que consiste en una especie de ruleta rusa colectiva que sirve como divertimento para el grupo de caballeros maduros que hacen jugosas apuestas sobre los "jugadores". La película (del director debutante Géla Babluani, cumple todos los requisitos del buen relato de intriga, guardando las revelaciones el máximo tiempo posible, desarrollando la trama sin apuros pero también sin demorarse en enredos innecesarios. A pesar de la impresión de "ya visto", especialmente para cualquier espectador de THE DEER HUNTER (El Francotirador-1978), el suspenso de las escenas del "juego mortal" es altamente efectivo, aunque el auténtico mérito de la película tal vez reside en el impecable blanco y negro de la fotografía y esa selección de secundarios cuyas caras, vistas en primer plano, son tan agresivas como las balas de los participantes.

LA MOUSTACHE (El Bigote-2005) de Emmanuel Carrère: Luego de varios años, Marc (Vincent Lindon), se afeita el bigote para dar una sorpresa a su esposa Agnes (Emmanuelle Devos), y a un matrimonio amigo. Aparte de la momentánea vanidad contrariada, Marc se cuestiona los motivos por los que nadie parece advertir el cambio en su fisonomía facial. Pero el asunto va más allá de su matrimonio cuando se da cuenta que tanto para su esposa como para sus amigos y colegas, él nunca tuvo bigote. Parecería como si los seres humanos no pudieran tolerar la ruptura de la continuidad lógica de los aspectos de sus vidas, y la situación mostrada en la película da pie a una espiral de enrrarecimiento, en la que el protagonista pasa de dudar de su propio sano juicio a sentir un clima de hostilidad y de persecución hacia su persona. Por supuesto, de la anécdota del bigote, los personajes pasan a cuestiones mayores, que tienen que ver con el matrimonio, con la familia, con las amistades. En un momento delirante de la película, Marc viaja a Hong Kong, donde paulatinamente, comienza a dejarse crecer el bigote nuevamente. Un espectador sano (que sabe bien si se afeita el bigote o nunca lo tuvo), analizaría la película y llegaría a conclusiones: a) Marc sufre una enfermedad mental que le hace perder relación con la realidad b) Agnes sufre una enfermedad mental que le hace perder relación con la realidad, de la cual el protagonista parece no darse cuenta c) Ambos sufren algún tipo de alucinación colectiva d) La película es tan solo la pesadilla de alguien (tal vez el director o el guionista), y su lógica no admite más cuestionamientos que los de un sueño. La película no parece querer dar una respuesta definida (ni siquiera algo ambiüo) a estas cuestiones. Tan solo parecería contentarse con sembrar dudas sobre la conducta de los seres humanos y sobre la fragilidad de algo que parece afianzado y firme, pero que por detalles nimios (un bigote, por ejemplo), se torna oscuro, paranoide y enfermizo.

FRAGILE (Frágiles-2005) de Jaume Balagueró: En la misma veta que han sabido explotar películas anteriores como THE CHANGELING (Al Final de la Escalera-1979), esta película de Jaume Balagueró ofrece con prolijidad y buen gusto la sempiterna historia del fantasma que acecha una edificación (en este caso, un hospital que funciona en un antigua mansión) y pone en jaque la vida de los que habitan el lugar (en este caso, doctores, enfermeras y un grupo de pacientes compuesto por niños de corta edad). La película se centra sobre una enfermera (Calista Flockhart), que se emplea en el turno noche en momentos que falta poco para realizar una mudanza (cliché nro. 1). Tratando de borrar un pasado de culpabilidad (cliché nro. 2), la enfermera se relaciona con una pequeña paciente (Yasmin Murphy) que dice haber visto una aparición denominada "Charlotte, la niña mecánica". La credibilidad de la enfermera es puesta en tela de juicio (cliché nro. 3), pero su investigación poco a poco la va conduciendo hacia una negra historia que explica la existencia del fantasma. Menos ambiciosa que THE OTHERS (Los Otros-2001), pero más cerrada en cuestión de lógica interna, FRÁGILES aporta, dentro de tanto cliché, algo original, que es el concepto de que los espectros de los muertos permanecen no en los lugares donde habitaron ni en los que murieron, sino en los que amaron.

GOJIRA: FAINARU UÔZU (Godzilla: La Última Batalla-2004) de Ryuhei Kitamura: En su película del 50º aniversario (última por la siguiente década, según poco convincente palabra de Toho Pictures), Godzilla es batido por una nave denominada "Gotengo", que consigue, luego de un cruento combate, enterrar al monstruo en las profundidades de los témpanos de la Antártida. Años después, la misma nave, pero con un nuevo comandante (Don Frye, en la vida real un luchador de catch afincado en Japón), se las ve canutas para dar cuenta de Manda, una serpiente marina gigante, que había sido vista en KAITEI GUNKAN (Atoragón: El Submarino Espacial-1963) - de hecho, el Gotengo no es más que una versión remozada del supersubmarino "Atoragón"-. El ataque de este monstruo gigante no es casual. En otras partes del mundo, otros titanes cosechan la destrucción y el caos en las grandes urbes:
- Anguirus (una especie de armadillo gigante recubierto de pinchos), visto en GOJIRA NO GYAKUSHU (El Monstruo de Fuego-1955) ataca Shanghai
- El langostino de 30 mts. Ebirah, proveniente de GOJIRA-EBIRA-MOSURA: NANKAI NO DAIKETTO (Los Monstruos del Mar-1966), dobla con sus tenazas una refinería de Tokyo
- Kinguseesaa, un perro faldero gigante, visto en GOJIRA TAI MEKAGOJIRA (Godzilla Contra Cibergodzilla: Máquina de Destrucción-1974), pisa con saña la ciudad de Okinawa
- Rodan, un pteranodón, visto por vez primera en SORA NO DAIKAIJU RADON (Rodán: Los Hijos del Volcan-1956), realiza todo tipo de fechorías en New York, siendo sus tres primeros testigos un oficial de policía blanco, un cafiolo y un vabagundo ebrio, ambos de color (lo que constituye un divertido segmento de "blaxploitation")
- El monstruo mecabiológico Gigan, que debutase en CHIKYU KOGEKI MEIREI: GOJIRA TAI GAIGAN (Galién, el Monstruo de las Galaxias-1972), y que en esta nueva película es hallado fosilizado, despierta de su letargo para sembrar el pánico en Tokyo
- Zilla, un saurio gigante que se parece al GODZILLA (Godzilla-1998) del cine norteamericano, ataca y destruye los principales edificios y construcciones de Sidney, Australia
- El mosquito de 50 mtrs. Kamacuras, visto en KAIJÛTÔ NO KESSEN: GOJIRA NO MUSUKO (El Hijo de Godzilla-1967), se dedica a picar París
- Kumonga, la araña colosal (proveniente de la misma película), se ceba sobre un parque de diversiones en Arizona
- Hedorah, el monstruo de la polución (originalmente un renacuajo), visto en GOJIRA TAI HEDORA (Hedora, la Burbuja Tóxica-1971), también se une oportunamente a la orgía de monstruos.

Con todos estos monstruos amenazando a la Tierra, ya se terminaron las preocupaciones banales de los seres humanos: economía y los jubilados, la crisis energética y los sueldos de los docentes, la corrupción y la inmigración, el costo de vida y la inflación: todo esto pasa ya a un plano secundario ante lo que parece ser "la Fin del Mundo". Ni siquiera la fuerza de combate M ("M" de Mutante), entidad nucleada en Japón para combatir peligros extremos, da abasto para liquidar a estos monstruos. La salvación viene (al menos en apariencia), de parte de unos extraterrestres denominados "los Xilians", que capturan a todos los monstruos infernales y hacen saber al Mundo que vienen en son de paz. Claro, si usted ha visto KAIJU DAISENSO (Los Monstruos Invaden la Tierra-1965), en la que unos extraterrestres denominados los "Xians" también venían con el mismo "cuento del Tío", se dará cuenta que lo que pretenden realmente los Xilians no es otra cosa que dominar la Tierra de la manera más sencilla posible. Para ello secuestran al Secretario de las Naciones Unidas (Akira Takarada, veterano de primera hora de la serie de Godzilla) y lo reemplazan por un androide que tiene un solo defecto: no pestañea. Para colmo, la Tierra es amenazada desde el espacio exterior por un asteroide llamado Gorath, que chocará contra el planeta en breve. Una amenaza similar se había cernido en YOSEI GORASU (Gorath, la Estrella Misteriosa-1962), aunque en esta película, el asteroide era 6.000 veces más grande que la Tierra. Ante el clima enrrarecido de la presencia de los alienígenas, el capitán del Gotengo y uno de los soldados mutantes (Masahiro Matsuoka), desenmascaran los verdaderos planes de estos villanos, quienes responden volviendo a liberar a los monstruos. Nuestros héroes deciden entonces que la solución es despertar a Godzilla y que se encargue de las amenazas. "Cuando el mundo esté destruído, ya no quedará nada por destruirse." Bajo esta premisa, Godzilla se levanta de su tumba helada e inicia su marcha hacia Tokyo (marcha sembrada por varias luchas ciclópeas). Luego de destruir a todos sus contrincantes, luego de aniquilar la amenaza de Gorath, luego de reducir a escombros lo que era una ciudad populosa, Godzilla se yergue sobre el alisado centro de Tokyo, listo para su último adversario: el temible Monstruo X. La refriega es encarnizada, hasta que el misterioso titán revela su auténtica identidad: se trata del temible Keizer Ghidorah, frecuente personaje del Kaiju a partir de SAN DAIKAIJU: CHIKYU SAIDAI NO KESSEN (Godzilla Contra Ghidorah: El Dragón de Tres Cabezas-1964). A pesar de la extensión de esta reseña, aún no tuvimos tiempo de mencionar la presencia de Mosura, la polilla gigante vista en MOSURA (Mothra, el Indestructible-1962), que le da una mano (o mejor dicho, un ala) a Godzilla, y el pequeño y simpático Minya, de KAIJÛTÔ NO KESSEN: GOJIRA NO MUSUKO (El Hijo de Godzilla-1967), que frena la colera de su padre sobre el final. La película funciona mejor como homenaje, ya que su disfrute aumenta a la enésima potencia si el espectador tiene en su haber algún filme previo de la serie. Posee todos los elementos técnicos que hacen al buen filme de monstruos gigantes (o "kaiju eiga"):

- Tiene buenos efectos especiales (parte nueva tecnología de CGI y parte tradicional recurso del "man in monster-suit" que pisa detalladas maquetas de ciudades)
- Las actuaciones son correctas y se destaca la caricatura del personaje de acción norteamericano que compone Don Frye (uno de sus diálogos memorables al jefe de los extraterrestres, es: "Hay dos cosas de este planeta que debes conocer, hijo: la primera soy yo, y la segunda es... Gojira")
- Las escenas de luchas entre monstruos están bien coreografiadas, especialmente una batalla tripartita entre Kinguseesaa, Anguirus y Rodan contra Godzilla (que es la más divertida) y el duelo final entre Godzilla y el Monstruo X (que es la más climática)
Sin embargo, el director Kitamura cae en el mismo vicio que había sufrido en VERSUS (Versus-2000), que consiste en el abuso de peleas (tanto de monstruos como de humanos, mutantes y extraterrestres) por encima del desarrollo narrativo. Claro, aquí hay tantos monstruos y tantos personajes, que 125 minutos son pocos para desarrollar todo como se debe. El personaje central, un mutante que tiene extraños poderes para resistir el dominio de los Xilians, nunca llega a revelar el motivo de sus resistencia. El director, en cambio, prefiere dedicar más tiempo a reverenciar la saga MATRIX con varios "Bullet-Time" en una excitante pelea entre dos mutantes motorizados o bien un mutante deteniendo con su mano los rayos al estilo Neo y a evocar THE RETURN OF THE JEDI (El Regreso del Jedi-1984), con un mutante ingresando en la nave nodriza extraterrestre (una especie de "Estrella de la Muerte") estilo Luke Skywalker, lo que son pasos en falso que operan en contra de la película. El cine norteamericano que se dedica al remake o a reescribir historias de personajes tradicionales, tiende a caer en películas pobres, irrespetuosas de sus fuentes, que dan una sensación errónea al espectador novel: "Si esta es la nueva versión de tal o cual serie o película, entonces, la versión original no debe ser mucho mejor." La nueva película de Godzilla, a pesar de estos pasos en falso, es respetuosa hasta de la primerísima película de la serie (que data de 1954), y, por encima de gustos o preferencias, probablemente anime al espectador curioso que disfrute el entretenimiento, a buscar o revisar estanterías empolvadas en busca de los viejos títulos de la filmografía del dinosaurio mutante más temible del Séptimo Arte.

HOSTEL (Hostel-2005) de Eli Roth: Tres muchachos con hormonas inquietas marchan a la capital europea del vicio, Amsterdam, con la intención de acostarse con la máxima cantidad de mujeres posibles. Un rumor les indica que hay un lugar en el que las mujeres, con solo escuchar sus acentos occidentales, se les arrojarán a los pies rogando ser sometidas por sus viriles encantos. Los tres protagonistas toman rumbo entonces a Bratislava, Eslovaquia, alojándose en un pintoresco Hostel en el que, inmediatamente, traban conocimiento con dos jóvenes pecadoras checas que les ofrecen con generosidad todo tipo de placeres carnales. "Cuando la limosna es grande, hasta el santo desconfía" dice el saber popular. Y en este caso se aplica a la trama, ya que la auténtica ocupación de estas ninfas es la de conseguir incautos para un siniestro entretenimiento que consiste en torturar seres humanos para luego asesinarlos. Quienes abonan para tal fin son, por supuesto, "turistas" con ciertas enfermizas desviaciones que gozan de un poder adquisitivo un tanto dilatado como para darse a tales juegos. Tal vez el aspecto más y mejor conseguido de la película tenga que ver con el de la sordidez. Filmada en escenarios naturales, hay una competente muestra de gore y truculencias, actuaciones convincentes, un par de diálogos memorables ("creo que hay que tener una relación más profunda con lo que comemos, me gusta tocar algo que murió para alimentarme", dice un hombre de negocios, posterior cliente de este juego mortal), algo de crítica social y un logro narrativo interesante: que el personaje principal tenga auténtica motivación psicológica para ejecutar su venganza -concepto en el que otra película distinta pero similar, 8 MM (1999) de Joel Schumacher, fracasaba en sugerir-. A pesar de esto, el director Eli Roth da algunos pasos en falso que obstaculizan el propósito de toda buena película de suspenso o terror: los personajes centrales son presentados a través de todo un primer segmento de comedia estilo "American Pie en un euro-sex-trip" que hace que poco importen sus destinos. Una vez que el segmento "terror" se inicia, la película solo ofrece miembros mutilados o baños de sangre, y la única escena que podía tener algún suspenso (el protagonista principal en la silla de torturas) está inconvenientemente resuelta. Hay algún entretenimiento para cinéfilos, que consiste en ciertos guiños a películas del patrocinante Quentin Tarantino y las extrañas citas de que la primer tortura que se muestra (un personaje que utiliza una tijera para triturar el segundo dedo del pie de su víctima) es similar a una vista en la rara exploitation SNUFF (1976) de Michael y Roberta Findlay, y de que el cartel promocional de la película está calcado de la modesta MANIAC (1980) de William Lustig.

THUMBSUCKER (Impulso Adolescente-2005) de Mike Mills: Un joven de 17 años se sigue chupando el dedo y, a pesar de los torpes intentos de su padre (Vincent D'Onofrio) y de la comprensión de su madre (Tilda Swinton), no logra dejar el vicio. Su dentista (Keanu Reeves) le aconseja someterse a una hipnosis con la que, si bien logra un éxito inicial, se revierte en desórdenes de conducta que motivan un diagnóstico tan simple e impreciso como "síndrome de hiperactividad adolescente". Justin se somete a un tratamiento con psicofármacos que le cambian la vida pero lo convierten en un adicto. Más adelante troca estas drogas recetadas por marihuana. Diálogos valiosos, actuaciones correctas, una trama entretenida y un intento de indagar la problemática de los jóvenes adolescentes de clase media alta que se amplia al núcleo familiar y a la sociedad misma, posee situaciones que ameditan sonrisas y que también reflejará algún aspecto de la vida de más de un espectador que se encuadre en los parámetros del personaje.

HAZE (Niebla-2005) de Shinya Tsukamoto: Un hombre (Shinya Tsukamoto) despierta y se encuentra a sí mismo atrapado en lo que parece ser un estrecho entrepiso, en los que su persona (a pesar de ser de moderada contextura física) cabe a las duras penas. Un manchón de sangre en un costado le da la impresión de que ha sido herido, pero la constante oscuridad, las extrañas torturas a las que es sometido, la ausencia de otros seres humanos o bien de pistas sobre como llegó a ese lugar, hacen que su mente comience a maquinar cosas. De a ratos se desvanece, y al despertar, se ve en diferentes partes de lo que parece ser una gran superestructura de concavidades, cañerías, entrepisos y mamposterías. En cierto momento despierta y se da cuenta que está de puntillas de pies en un pequeñísimo corredor surcado por una cañería que pasa a la altura de su boca, que debe mantener abierta de par en par para poder estar en tal reducido espacio. Originalmente un cortometraje de 25 minutos de duración, ampliado a mediometraje, esta película de Tsukamoto surca algunos conceptos interesantes, presentes en su filmografía. Realizada sin ningún tipo de pretenciones, sin grandes medios, con una buena idea, aumentando el mismo tipo de sensación presente en la exitosa CUBE (El Cubo-1997), la película mantiene en todo momento el interés sobre la trama y, a pesar que no se define con ninguna certeza, queda un fuerte resabio de encierro y claustrofobia, útil para dar la idea que no solo la vida es una lucha, también la muerte puede serlo.

NUIT NOIRE (Noche Oscura-2004) de Olivier Smolders: Un entomólogo (Fabrice Rodriguez) empleado en un museo consagra su vida al estudio y la ciencia, yendo una vez a la semana a un extraño "onirólogo" (por así decirlo) que, a través del oído, se encarga de auscultarle sus sueños. Esto, por delirante que parezca, no parece fuera de lugar en el mundo donde vive Oscar, permanentemente nocturno (a raíz de un eclipse, el sol está siempre obstruído por la luna, y se muestra solo breves segundos al día). Una noche (ya que, repetimos, en esta película no hay días), Oscar regresa a su casa y se topa con una mujer de color que convalesce en su cama. Se trata de la esposa del conserje del museo, quien por supuesto no quiere hacerse cargo de ella y que dice que está muy enferma. Este será el comienzo de un festival-homenaje a, entre otros, a directores tan personales como los de ERASERHEAD (Cabeza Borradora-1977), de David Lynch y NAKED LUNCH (Almuerzo al Desnudo-1991) de David Cronenberg. El problema con la película es que Lynch hay uno solo, y lo mismo para Cronenberg, por eso su planteamiento narrativa y, principalmente, estilística, no llega a opacar a las sendas propuestas de los que se inspira. Esto, sin embargo, no implica que la película no sea fina o no tenga una hipnótica atracción en su fotografía (especialmente en las secuencias de insectos).

CHINJEOLHAN GEUMJASSI (Simpatía por la Mujer Venganza-2005) de Park Chan-Wook: La venganza, una de las más aberrantes inspiraciones del ser humano, parece estar presente en todos y cada uno, desde los más salvajes hasta de los más tranquilos y hogareños. La venganza es igualmente negativa, tanto si es respuesta de una agresión justificable o bien si excede al daño realizado por el agresor. Recibido un pisotón en el pie, Venganza es tanto dar un pisotón en respuesta como tomar una ametralladora Uzi 9 mm semi automática y coser a balazos no solo el cuerpo del autor del pisotón sino también el de toda su familia, vecinos y animales domésticos. Luego de dos películas sobre el tema, el director coreano Park Chan-Wook, que había demostrado en BOKSUNEUN NAUI GEOT (Sympathy for Mr. Vengeance-2002) y en OLDBOY (Cinco Días para Vengarse-2003) que la venganza destruye a ambas partes del asunto (vengador y vengatario, por así denominarlo), aquí parece haberse propuesto pergreñar que situación sería capaz de propulsar a personas comunes y corrientes (como padres de familia de distintas extracciones sociales) a cometer los más sadísticos actos de violencia de todos los mostrados en las anteriores películas. La trama sigue la odisea de Geum-Ya (Lee Yeong-Ae), una joven que a los 19 años escandalizó a la opinión pública de Seúl, confesando haber secuestrado y asfixiado a un infante. Más de 10 años después, luego de purgar su pena en prisión, Geum-Ya sale en libertad y se emplea en una pastelería, donde pone en práctica su elaboradísimo plan de venganza. El objetivo es llegar hasta su antiguo profesor (Choi Min-Sik), autor no solo de esa muerte sino también de la de varios niños más, a lo largo de los años. La agresión es la más aberrante jamás imaginada contra cualquier ser humano. Y por eso la posterior venganza es la más exacerbada de todas las películas. Para lograrlo, la protagonista se toma todo el tiempo del mundo, consiguiendo puntuales contactos en el mundo de la cárcel de los que, al salir en libertad, va solicitando distintos tipos de favores (en eso Geum-Ya se parece al viejo personaje del pulp norteamericano, La Sombra, que ayuda a personas con la condición de poder solicitar de estas un favor en retribución). Los personajes secundarios son presentados en el estilo testimonial que el cine norteamericano ha venido haciendo desde las películas de Jack Webb hasta KILL BILL (2003) de Quentin Tarantino, director con el que además comparte este gusto por la hiper violencia estilizada. Vista como conclusión de una trilogía (salvo que a Wook se le ocurra ampliar a tetralogía), la película es más poética que las dos anteriores, posee idénticos ribetes de delirio y aberración, y presenta tal vez menos suspenso que OLDBOY. Tiene algún que otro personaje de sobra (como el del pastor cristiano cuyas apariciones promueven siempre pasos de comedia en falso), y algún momento de lógica forzada, especialmente la conducta del matrimonio australiano que adopta a la hijita de la protagonista, pero sin embargo el fino acabado la hace una digna conclusión.

DALKOMHAN INSAENG (Una Vida Agridulce-2005) de Kim Ji-Woon: Quienquiera que haya visto una película policial, así como quienquiera que disfruta de un buen plato de tallarines al tuco, sabe cual es su punto justo, es decir "su dente". En otras palabras, cuando nos servimos un plato de fideos sabemos que es lo que vamos a degustar, aunque esto no implica en que proporciones. Si tiene mucha cebolla o mucho picante, si el fideo fue colado prematuramente, o si no tiene suficiente queso rallado, tal vez el plato ya no sea de nuestro agrado. En el policial, y, siendo más específicos, en el policial japonés (algunas veces denominado "cine de yakuzas"), pasa exactamente lo mismo. En este caso, la película coreana de Kim Ji-Woon, director de esa joyita titulada JANGHWA, HONGRYEON (Relato de Dos Hermanas-2003), se esboza sobre el molde del cine de yakuzas japonés, pero exagerando ciertos aspectos que, visto por espectadores impacientes, tal vez puedan ser interpretados como una trivialización que la acerque al cine de Hollywood: nos referimos a esa característica presente en el cine norteamericano por la que un protagonista de acción logra salir indemne de todos los peligros sin otro perjuicio más que raspones o algún chichón. Si podemos sintonizar el gusto a esta característica de la película, entonces podremos disfrutar de la historia de Sun-Woo (Lee Byung-Hun), un matón, que recibe un encargo de parte de su jefe (Kim Yeong-Cheol), que consiste en cuidar a la novia adolescente de este (Shin Min-A), ya que sospecha que tiene un amante. Sun-Woo no es un matón ordinario, sino un tipo brillante, tanto desde el punto de vista físico como del razocinio. Tal vez, a primera vista, la tarea resulta liviana, pero lo liviano se torna pesado cuando Sun-Woo debe cumplir la orden de su patrón: si comprueba la infidelidad, el matón debe terminar a ambos. Las cosas se ponen difíciles hasta un punto extremo y la violencia no se toma respiro, especialmente debido al hecho que ninguno de los dos (jefe y matón) quiere dar el brazo a torcer. Hay buenos diálogos, buenas actuaciones, hiper-violencia bien coreografiada y, tal vez lo más valioso, una interesante indagación sobre el mundo de los matones (o secuaces) y de porque se mantienen en esa categoría. En la película la mayoría de los secuaces -quien más quien menos- son incopetentes. A pesar de que esto no es ninguna novedad (el cine ya ha mostrado con suficiente reiteración este detalle), aquí la incopentencia, tal vez por vez primera, está explicada. La respuesta parecería ser que, no solo los secuaces son incopetentes, sino también sus jefes (claro, su incompetencia es mucho más refinada). La lógica nos dice que un jefe es jefe por su capacidad de dirigir. Sobre el tema se pueden hacer algunos enunciados: - Un buen líder sabe rodearse de buenos elementos - Un secuaz incopetente sigue siendo secuaz toda su vida - Un secuaz brillante - como se demuestra en la mítica SCARFACE (Scarface, el Terror del Hampa-1932), y también su remake de 1981- implica, a largo plazo, una amenaza su jefe Un secuaz brillante, por ende, es una paradoja en el mundo del hampa, ya que si tiene mucha lucidez, amenazaría opacar a su jefe, y si es mentecato pone en riesgo la seguridad de las operaciones de todo el grupo. En un momento el jefe dice: "un jefe no puede ser contradicho por su subordinado, por más que se equivoque y que ambos lo sepan." La solución parecería, entonces, para un jefe, rodearse de secuaces lo suficientemente lúcidos como para no embarrar sus planes y lo suficientemente chatos como para no poder aspirar a reemplazarlo. Esta, aunque nos estamos yendo un poco por las ramas, parece ser una constante, llevada a cabo por grandes líderes de la Historia, desde Alejandro Magno hasta Perón y desde Marco Aurelio hasta Napoleón.

Terminada estas reseñas, deberíamos habernos tomado el tren de vuelta, pero... he aquí que, picados por la curiosidad y, bajo el razonamiento que si alguien erróneamente programó THUMBSUCKER en la sección Cerca de lo Oscuro, también se pudieron haber programado películas con elementos fantásticos en otras secciones, vimos algunas otras películas de otras secciones. Lo más rescatable vino, claro, desde el punto de vista del cine de dibujos animados. En I MARRIED A STRANGE PERSON! (Me Casé con una Persona Extraña-1997), del gran Bill Plympton, un ser humano recibe una descarga proveniente de su aparato de televisión que le genera una especie de lóbulo con forma de tumor en la nuca. A partir de ese momento este personaje puede convertir en realidad cualquier cosa que desee, por más fantástica o delirante que fuera. Con el correr de la película, una investigación nos muestra que la lóbulo en cuestión es en verdad una exacerbación de la parte del cerebro donde reside la imaginación. Un argumento simple pero efectivo.

Funciones de lujo

Uno de las más significativas fueron las que se produjeron en el Homenaje a José A. Martínez Suárez, con la proyección de EL CRACK (1960), DAR LA CARA (1962), LOS CHANTAS (1975), LOS MUCHACHOS DE ANTES NO USABAN ARSÉNICO (1976) y NOCHES SIN LUNAS NI SOLES (1984). En estas proyecciones (varias de las cuales fueron copias nuevas), estuvo presente el propio realizador, para hablar sobre las películas y responder consultas del público, un lujo que el público presente supo apreciar. (Fotografía: c-)

A continuación reseñas de los títulos vistos:

EL CRACK (1960): Un chico joven (Osvaldo Castro) que juega en el potrero, tiene la posibilidad de cambiar su vida cuando el club para el que juega recibe una oferta de compra por 400 mil pesos, de parte de un club grande para el que podría firmar un contrato para jugar que equivaldría a un sueldo mensual de 15 mil pesos. La película muestra el drama deportivo y el choque entre deporte y espectáculo desde todos los puntos de vista posibles, desde el primario del hincha de fútbol (encarnado por un usualmente efectivo Marcos Zucker) hasta el panorama cínico del negociante que propicia la operación comercial (rol que cumple a la perfección el Jorge Salcedo), pasando por la perspectiva del padre del chico (el gallego dueño del boliche que se desloma trabajando, impecable Tacholas), de la novia del chico y la del Crack cuyo pase a España da motivo a la trama (la fuerte presencia de Enrique Kossi). No hay "nada nuevo bajo el sol" decía un conocido personaje de la literatura, y la película muestra con rigor casi testimonial el ascenso y caída de la joven promesa del fútbol, historia que se ha repetido en otros deportes (especialmente, el boxeo), y en todas las épocas, siempre teniendo como eje el choque entre el idealismo del deportista y la realidad del negociado, aunque haciendo más hincapie en el negocio que en la parte deportiva. Sin embargo, hay espacio para el poema visual con las música de Piazzolla ilustrando las tomas del estadio en la mañana del partido y para la tensión: uno sabe de antemano que la historia tiene que terminar mal, a pesar de lo cuál, el partido final es electrizante. Sumados a estos valores, no hay que dejar de resaltar el suculento retrato de la ciudad de Buenos Aires que hace el director.

LOS MUCHACHOS DE ANTES NO USABAN ARSÉNICO (1976): Una actriz de la época de oro del cine (Mecha Ortiz) vive de recuerdos en una quinta, retirada del mundo exterior, y con la única compañía de su marido (Arturo García Buhr) y dos amigos: el contador (Mario Soficci) y su médico (Narciso Ibáñez Menta). La tensa armonía se quiebra con la llegada de una joven martillera (Bárbara Mugica) que viene a ver la casa para aconsejar su futura venta. Claro, hay intenciones ocultas en todos los personajes, dobles sentidos y suaves climas de tensión, incluso sexual. Hay un desequilibrio y una conspiración, y los tres ancianos se complotan contra las mujeres. Son tres viejos que se comportan como un solo personaje colectivo, una sola mente dividida en tres cuerpos. El peso actoral lo carga Narciso (y está espléndido, en la que sería su última película argentina). Hay bromas y guiños para cinéfilos, pero la película no se reduce a un ejercicio de cinefilia. Habrá instantes que rocen el suspenso, momentos de pura comedia negra y una resolución macabra que guarda el sutil tono que la historia mantiene durante todo el metraje: un tono suave, atractivo y sereno, que tal vez exija al espectador algún esfuerzo para ponerse en sintonía.

NOCHES SIN LUNAS NI SOLES (1984): Un delincuente (Alberto de Mendoza) se escapa de un juzgado, ayudado por tres malandrines, para buscar a su amigo de toda la vida, que está terminalmente enfermo. El policía encargado de atraparlo (Lautaro Murúa) sabe que hay un un botín oculto de por medio. Una acabada muestra de cine policial, que goza de algunas actuaciones excelentes (Murúa y Guillermo Battaglia), escenas de acción automovilística inusuales para el cine argentino, y una confrontación entre rufián y policía separados por un marco de puerta que precede en más de una década a la protagonizada por Robert De Niro y Al Pacino en HEAT (Fuego Contra Fuego-1995). La fotografía es tan buena como cualquier otra película de su director aunque la tensión de la trama se ve lastrada por un cierto exceso de escenas de alcoba entre De Mendoza y la prostituta encarnada por Luisina Brando. Como notable, se resalta que, narrativamente, la película revierte el síntoma del film-noir clásico, con el héroe llevado a la perdición por la femme-fatale. Aquí es la femme-fatale la que intenta salvar al protagonista de su destino trágico.

Para completar este panorama aconsejamos revisar la crónica del director de Cine Braille, también socio gerente de Cinefanía, Pablo Martín Cerone, cuyo link ofrecemos a continuación: http://www.cinefania.com/cinebraille/festiblog.htm. Cerone detalla gran cantidad de cortometrajes, todos muy interesantes (especialmente, Las Misteriosas Exploraciones Geográficas de Jasper Morellos).

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Cada una de las proyecciones de este festival fue precedida de tres cortos, que pasamos a reseñar, dos de los cuales son casi idénticos y se pueden encontrar en muchas ediciones actuales de películas en DVD.

COMPRAR PELICULAS PIRATAS ES UN CRIMEN: Una serie de viñetas nos informan de cosas que el espectador no haría, a saber: robar un automóvil, robar una cartera, robar un teléfono celular, etc. (parece ser que el mensaje no tiene en cuenta que cierto tipo de personas que se dedican al hurto y a la caquería, pueden tranquilamente, en su tiempo libre, ir a ver una película al cine). La comparación se efectúa sobre una pareja que mira las películas que un vendedor de copias de las denominadas "piratas" o "bootlegger" ofrece a la venta a un módico precio y rechaza horrorizada semejante acto. La conclusión que es "comprar peliculas es un delito", fue corregido por algún espectador que dijo "el precio de venta de una película original es un robo".

DESCARGAR PELICULAS ES UN DELITO: Una serie de viñetas nos informan de cosas que el espectador no haría, a saber: robar un automóvil, robar una cartera, robar un teléfono celular, etc. (parece ser que el mensaje no tiene en cuenta que cierto tipo de personas que se dedican al hurto y a la caquería, pueden tranquilamente, en su tiempo libre, ir a ver una película al cine). La comparación se efectúa sobre una joven que observa como se descarga de un sitio web una película (en realidad no parece ser una película entera, ya que la velocidad es apabullante). Poco antes que su descarga se complete, la chica cancela el proceso y se va compungida de la habitación. La conclusión que es "bajar peliculas es un delito", fue corregido por algún espectador que dijo "el precio de venta de una película original es un robo".

PRESENTACION FESTIVAL: Una animación generada por computadora que representa la zona de Mar del Plata conocida como "la Bristol", muestra una imagen nocturna a una hora en que ni un alma está en la calle. Un viento recorre los afiches de publicidad del Festival y, de repente una ráfaga desprende de la pared un afiche pequeño, que inicia un alocado vuelo a través de la rambla, diversos conocidos edificios de la ciudad, el muelle y finalmente se posa en un foco de un faro. Cuando el faro dirige su luz a la ciudad, una imagen gigantesca del afiche se proyecta al tiempo que la voz en off presenta el Festival. Impecable el trabajo de texturas, de animación, con un solo punto flojo que es el propio afiche volador.