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FORTUNATE SON

(John Fogarty)

Álbum: Willy and the Poor Boys - Creedence Clearwater Revival - 1969

California, 1967: ¿a quién no le hubiera gustado vivir esa época en ese lugar? Con unos dólares en el bolsillo, uno hubiera podido ver, ese Verano del Amor (y sin contar las visitas de grupos ingleses) nada menos que a los Doors, a Jefferson Airplane, a los Grateful Dead, a Big Brother & The Holding Company (el grupo del que salió Janis Joplin), a los Byrds, a The Band, a Buffalo Springfield (el grupo de Neil Young, Stephen Stills y Richie Furay), a Frank Zappa & The Mothers of Invention, a Captain Beefheart & His Magic Band, a Carlos Santana, a The Mamas & The Papas... y a los Golliwogs. Una banda que logró sacar algunos simples, y cuya mayor importancia reside en haber desaparecido para que sus guitarristas Tom y John Fogarty, su bajista Stu Cook y su baterista Doug Clifford decidieran armar Creedence Clearwater Revival.

La nueva banda hacía rock and roll pasado por el tamiz de influencias country y Cajun, la música tradicional de la Luisiana rural, una región cuya cultura predominante no es anglosajona, sino derivada de la de colonos protestantes franceses y sus esclavos africanos. Su capital es (¿era?) Nueva Orléans.

La nueva banda sonaba ajustada desde el principio, con los pies bien firmes sobre la tierra, en una época en la que el rock celebraba las zapadas psicodélicas y las letras de un surrealismo lisérgico. Y la mayor parte del mérito era de John Fogarty. El sonido de su guitarra era la característica más notoria de Creedence: su forma de tocar los fraseos del rock and roll recordaba a la de Scotty Moore (el guitarrista de Elvis Presley) y a la de Carl Perkins (el autor de "Blue suede shoes"). Sus melodías eran gancheras pero no obvias. Y sus letras eran sencillas sin ser banales; aceptaban una lectura política, sin resultar panfletarias. Y, a menudo, chocaban contra el hedonismo hippie predominante: como dijo John Fogarty a la Rolling Stone en un reportaje en 1969: "somos tan étnicos ahora, con nuestro pelo largo y toda esa mierda. Pero cuando vamos a las cosas que la civilización necesita para funcionar... ¿Quién va a ser el recolector de la basura? Ninguno de nosotros desea serlo. La mayoría de nosotros diría: 'eso está por debajo de mí, yo no voy a hacer ese trabajo'".

El álbum debut de la banda apareció en el verano (boreal) de 1968, y anduvo bastante bien. En enero del año siguiente salió "Bayou country", un disco que contenía futuros clásicos como "Bad moon rising," "Proud Mary" y "Born on the Bayou", y que llegó a disco de platino. Con dos discos editados en seis meses y actuaciones frecuentes, tal vez sorprenda que, en agosto, haya salido otro disco con temas nuevos, "Green river", otra vez disco de platino. ¡Pero lo que no se puede entender, en esta época en la que casi no hay bandas que saquen al menos un disco por año durante tres o cuatro años seguidos, es que, en noviembre de 1969, Tom Fogarty y compañía hayan sacado su cuarto disco en un año y medio, tercero del año: "Willy and the Poor Boys"! Que, encima, fue el tercer disco de platino al hilo.

Uno de los temas destacados de ese álbum fue "Fortunate son", un rockito irresistible de apenas poco más de 2 minutos. Fogarty estaba en contra de la intervención norteamericana en Vietnam, como casi toda la cultura joven de la época, pero fue uno de los pocos que señaló la injusticia de que fueran los hijos de la clase trabajadora los que terminaban matando y muriendo en los arrozales devastados por el napalm. Los hijos de los senadores, o de los millonarios, o de los generales y almirantes, tenían siempre una salida: una exención médica trucha, o un viaje de estudios a universidades de Canadá o Europa, o cumplían el servicio militar en suelo norteamericano, lejos de la guerra (como un tal George Bush Junior, no sé si ubican...).

En una parte, la canción reza: "some folks inherit star spangled eyes". La traducción literal sería "algunos chicos heredan ojos adornados de estrellas", una imagen muy poética, y que es también un juego de palabras con el himno nacional, "Star spangled banner".

La canción es sencilla, con un suave cambio de tonalidad en el estribillo y un corte de ritmo en el medio. Fogarty la canta con rabia indisimulable, y logra darle toda la urgencia necesaria.

El propio John Fogarty como solista, Jefferson Airplane, U2, Bob Seger y Kid Rock., entre otros, han hecho covers de este tema.

 

Algunos chicos nacieron para llevar la bandera

Son rojos, blancos y azules

Y cuando la banda toca "Viva el jefe"

Apuntan el cañón directo a vos

No soy yo, no soy yo

No soy el hijo de un senador

No soy yo, no soy yo

No soy un hijo afortunado.

Algunos chicos nacieron con cucharas de plata en la mano

Señor ¿no se ayudan a sí mismos?

Pero cuando el recaudador de impuestos llama a su puerta

Señor, la casa luce como un negocio de cosas usadas

No soy yo, no soy yo

No soy el hijo de un millonario

No soy yo, no soy yo

No soy un hijo afortunado.

Algunos chicos heredan ojos adornados de estrellas

Ellos te envían a la guerra

Y cuando les preguntás cuánto más debemos dar

Oh, sólo responden "más, más, más"

No soy yo, no soy yo

No soy el hijo de un militar

No soy yo, no soy yo

No soy un hijo afortunado.

Reproducido en la revista virtual uruguaya LadoB..., en su número de setiembre de 2003.

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